sábado, 11 de diciembre de 2010

Erasto Armas

Déjame que te cuente…  
Por Sergio M. Trejo González.
Un casual encuentro con el Señor Erasto Armas Jiménez…frente a su domicilio particular, recién operado de un tumor, con un parche en el occipital… todavía en periodo de rehabilitación, notablemente disminuido de sus facultades físicas pero con un considerable entusiasmo personal, inspira las líneas de esta columna. En primera  instancia para felicitarlo por el round importante que lleva ganado en esta lucha por la vida. No ha sido el único combate que sostiene, pero si ha sido el mas prominente.  De Erasto armas  se puede escribir un tomo, un tratado, una obra… se debió haber escrito hace mucho.
Hace cosa de un año señalé en una de mis colaboraciones  que alguien debía escribir algo sobre la Sociedad Cooperativa de Transportes del Istmo S. C. L. Algo bonito hacia esa pretérita empresa de traslado de gente; algo significativo de aquellos tiempos que han quedado lejos…cuando se llenaban de personas, animales y bultos los autobuses ¡hasta la canastilla!. La época de aquellos que se han marchado, como se fue mi señor padre José Guadalupe Trejo Reyes; como se despidieron los señores  Santos Sandoval Rodríguez, Teofilo Pedrero Custodio,  don Ricardo Carrillo Alor, Guillermo Carrillo de la Fuente, Ramón Montejo, Carlos “Quincho” Armas, “Lagarto Parado” Andrés Fernández Alemán, Beto Alfonso, Rosalino Evaristo ”Chelino”, “El flaco”, “El Chato” Constantino, don Fernando Suárez… Panchito  Sánchez, Paquito, El Prof. Fallo Cano, Nacho Barreiro, Félix Padua. “Chicho” Martínez, con Manuel, Pablo Ledesma, Santiago Sánchez Aguirre… Hace un año, dije en estas paginas, en la fecha del deceso de Don Ambrosio Salcedo, que Acayucan tiene tanto cariño, como un servidor, por  transportes del istmo; señalé que  ahí anda don  Carlos Figarola Pavón, Abraham Gómez Fernández, Clemente Sánchez,  Chepe kleen, Molina… Todos ellos personas de trabajo. De estos mayores aprendimos a ganarnos la tortilla con el sudor de la frente… Parte de la  historia viva de Transportes del Istmo, he dicho y lo sostengo, es indiscutiblemente Erasto Armas Jiménez, junto a otros actores, personaje importante en  el desarrollo de esta región…algo más que referencia nostálgica. Se necesita, cierto, una pluma elocuente para significar  esa aportación valiosa,  algo profundo de la huella que el polvo de los tiempos pretende borrar… que tal vez ni los propios hijos de cada uno de estos socios alcanzan a concebir… Un servidor solo mantiene interés subjetivo y sentimental hacia dicha empresa, pues dos de mis hermanos trabajan en ella… no debía importarme  que se diga que tal organismo transportista está en la ruina… No, no está en la  quiebra pero si está muy jodida… y, eso duele… porque vemos nacer, crecer y desarrollarse otras empresas cardinales que arriesgan capitales importantes.
Muchos acayuqueños  observamos con admiración y beneplácito que empresarios conocidos como los Señores Ernesto Orozco Centurión, Genaro Pegueros, Emilio Ache Teruí, Bernardo Collia Orozco, Lupita Ruiz Padrón, Noé Rodríguez Vidal, entre otros que escapan a mi memoria, posean bienes y brinden servicios en el país, con oficinas  propias en Zaragoza No.1303, de Coatzacoalcos,  en una envidiable suma y concurso de experiencia con Integradora del Transporte Golfo Istmo, S.A. de C. V. Estamos hablando de una entidad que mueve en cosa de 10 años un equipo de 350 trailers… 145 jaulas (Side kits), 120 plataformas (Flat decks), 20 cajas secas (Dry Vans), 50 tolvas (Dump) y 15 Lowboys… digamos que, para responder a la demanda de servicios integrales de transporte.
Mi naturaleza curiosa, analítica e indiscreta me llevaron, alguna vez, a  conocer los detalles de la historia del transporte en Acayucan…y por ende los renglones de la Sociedad Cooperativa del Istmo… cuando no había carreteras asfaltadas, cuando había panga en Hueyapan de Ocampo, en Alvarado… para ir a Tlacotalpan…para llegar a San Juan Evangelista… ahí se encaramaban los camiones, sobre esas plataformas de hierro con motor y estaques de aire para su flotabilidad, cuya función operativa era  llevar las unidades con personas a bordo hacia la otra orilla del los ríos… Antes, siendo el ferrocarril el medio de transporte que existía para llegar, por Ojapa,  a la ciudad de México, los pioneros del servicio de transporte, los señores Iglesias, Fonseca y Ramón fueron quienes a lomo de animales trasladaban a los viajeros… en los años 20s vendría la primera unidad con motor que rodara en nuestra ciudad, propiedad del señor Pedro Garibay. Luego aparecería la época de camiones con nombres peliculescos… “Tarzan”, de un tal Diego lagos. Miguel Lajud, con su “Titan” y don Abraham Lajud, con su “cuatro vientos”… Estuvieron  por ahí circulando en aquel período de calles sin concreto “El Nacuyaca” y hasta un “Temoyo”… por supuesto que las unidades referidas nada tenían que ver con los actuales  vehículos  automáticos, con suspensión de aire, dirección hidráulica, climatizados, asientos reclinables… Sofisticados y flamantes omnibuses  de control computarizado vía satélite que hoy nos trasportan…aquellos si eran guajoloteros con guajolotes en blanco y negro.
Es destacado que el 4 de marzo de 1949, como resultado de algunas convocatorias de don Rubén Domínguez, tuvo lugar la fundación de la Sociedad Cooperativa de Transportes del Istmo, S.C.L.; se discute la cifra cabalística de 41… número de personas que formaron aquella floreciente empresa …con un consejo de administraron que presidía Don Pedro Martínez Lara… un historia aparte… me la contaron… yo no estuve ahí, solo me dicen que Armando Pavón Moscoso, Onésimo J. Armas Bretón, Felipe Cano, son algunos que aparecen en el acta constitutiva …Los chóferes de aquellas primeras 5 unidades se comenta que fueron “el Charrasco” Julio Sandoval, Marcelo Ramírez, Augusto Ortiz y Francisco “el charro” Montiel… por ahí andan estos dos últimos… luego vinieron hermanos pequeños del transporte vecinal… Sotavento, Los Tuxlas y Azulitos.  El auge, la etapa boyante, la belle époque del transporte colectivo… Se sabe que llegaron a circular mas de 200 unidades pintadas de blanco y marrón.
 Caminante, son tus huellas el camino, y nada más; caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante, no hay camino, sino estelas en la mar.
Ayer salude a Erasto Armas Jiménez y me dio gusto verlo recuperado. Me llené de nostalgia y de cierta melancolía que aquí plasmo, en un promedio de 7280 caracteres… como evitarlo, si lo conozco desde que era un chamaco; si lo miraba  conversar en sus asuntos laborales con mi padre… en aquel “San Camilo”, la unidad 119, también en el 117 o su 112. Hasta que  mi progenitor murió. Luego, cuando parte de mi familia tenia que tratar con Erasto asuntos de los camiones que administraban.No ha sido fácil. “La vida para vivirla hay que sufrirla y amarla…”
 Yo estuve ahí, cerquita,  en Transportes del Istmo…observé  a Erasto en aquellas luchas contra Ángel Cabrera Vidal… Nemesio Aguilar… en esas coaliciones, en el puerto jarocho, cuando los movimientos violentos, con quema de camiones, por  la clase estudiantil para obtener los beneficios del “medio pasaje”… con el licenciado Ignacio Álvarez Lobato compartiendo la mortificación por el crecimiento de la competencia… luego llegaría el “Sur”. Nos conocemos. Hemos visto crecer la tribu; hemos sido mutuamente respetuosos cuando sostenemos charlas amenas sobre  el  derecho y las ideas que ponderamos.  Erasto ha sido un líder. El famoso “Catrín” detentó mucho poder y continua con el.  Políticos importantes tenían que visitar sus oficinas cuando por acayucan pasaban. Mantuvo buenas relaciones con toda autoridad. Tuvo voz y voto en la integración de los cuerpos edilicios. Erasto Armas Jiménez, pudo ser Presidente Municipal. Su presencia es apreciada y su palabra es escuchada. A un servidor le impone aprecio conversar con Erasto. trato al señor Armas Jiménez con respeto, porque ha existido en nuestro transito cordialidad de su parte. Quisiera uno preservar aquel ciclo de bonanza, cuando la empresa de los carros color chocolate estaba en el pináculo, pero el tiempo ineluctable ha transcurrido… ya no debemos andar en esos trotes al mismo paso. La opinión  de Erasto es bien atendida por sus amigos, que son bastantes. Está vivo y con ganas de vivir, y son mis deseos que Dios lo atesore de animo, fortaleza y bienestar. Se comenta que Transportes del Istmo, la empresa mas prospera de la región en otros tiempos, esta navegando con vientos adversos…No lo quiero creer  porque tengo esperanza,  sinceramente, de ser testigo del rescate y la prosperidad de la célebre, gloriosa y triunfadora   Sociedad Cooperativa de Transportes del Istmo, S.C.L.
Deseo para Don Erasto Armas Jiménez, muchos años de existencia. Dios le conserve la salud suficiente para vivir con dignidad.

2 comentarios:

JULIO CESAR dijo...

PUES LA VERDAD ESTA MUY BIEN SU COMENTARIO, SOLO QUE LOS QUE SALEN EN LA FOTO MUCHOS YA NO EXISTEN Y OTROS DESERTARON DE LA EMPRESA, SOY EL LIC. JULIO CESAR GUTIERREZ ZAMUDIO, TESTIGO DE LA SOCIEDAD COOPERATIVA DE TRANSPORTES DEL ISTMO, S. C. L.

Issa All M. dijo...

Hermosa crónica de la SCTDEL ISTMO, desde muy pequeña pasaba por la terminal, guardo en la memoria muchos nombres entre los que aquí se han mencionado, que otro transporte si no este que sirvió a la ciudadanía deAcayuqueña, Jaltipan; Mina y Puerto... Con mucha nostalgia mis saludos.

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