Javier Guerrero Baeza
Déjame que te cuente…
Por Sergio M. Trejo González.
¡Me sorprendió la muerte!
El súbito deceso de mi amigo Javier Guerrero Baeza, con quien todavía charlamos la noche de anoche, me derrumba. Esa es la ironía de la vida…Los designios del Señor son inescrutables, por eso no vivo apasionado a las cosas materiales. Porque la inteligencia humana es facultad limitada que no puede penetrar en lo absoluto. El Dios omnipotente, el Dios de las misericordias, bendijo siempre las actitudes de Javier y le otorgó el éxito inmarcesible del deber cumplido, de las obligaciones satisfechas, de la caridad que todo lo perfuma, de la comprensión que todo lo perdona.
El 22 de noviembre del 2005. Celebrábamos la inauguración de “Asesores y Consultores legales”, en el despacho donde desarrollaríamos con él casi un año de actividades profesionales. Eran momentos de alegría…hoy velamos su cuerpo. Son cosas que duelen, cosas de la existencia. Me entristece la muerte de mi amigo Javier, me consterna saber que un amigo cercano se va. Quedan sin embargo los recuerdos: El camping aquel, hace dos años, en playa hermosa… con su esposa e hijas, con Luisón y familia, con el chilango Pacheco y su señora. Un servidor acompañado por la filosofia de que mas me vale andar solito para disfrutar de la naturaleza.. Javier dirigía la instalación de las casas de campaña ( luego de esas brochetas y malvaviscos asados) la noche seria larga… sobre todo porque un “sur” entró, a las 3 de la mañana, y a desmantelar todo y, a reirnos de nuestra suerte. Con Javier Muchos viajes a Xalapa, desayunos placenteros (VIP) en el equilibrio de las chingas de cada viaje a la capital del estado, y a Coatzacoalcos para ganarnos la tortilla… No tengo ahorita palabras para llegar al corazón de sus seres queridos… No encuentro el lenguaje apropiado para aliviar en algo el dolor de su familia; comprendo además que en estas circunstancias nada que se diga llenará el vacío dejado por una persona tan importante en la vida de alguien.
No conozco otro bálsamo de consuelo para quienes perdemos un ser amado que la oración… es cosa de buscar en ella esa mano piadosa que nos trae la esperanza de que volveremos a reunirnos con quienes son llamados por nuestro Padre Todopoderoso.
Déjame que te cuente…
Por Sergio M. Trejo González.
¡Me sorprendió la muerte!
El súbito deceso de mi amigo Javier Guerrero Baeza, con quien todavía charlamos la noche de anoche, me derrumba. Esa es la ironía de la vida…Los designios del Señor son inescrutables, por eso no vivo apasionado a las cosas materiales. Porque la inteligencia humana es facultad limitada que no puede penetrar en lo absoluto. El Dios omnipotente, el Dios de las misericordias, bendijo siempre las actitudes de Javier y le otorgó el éxito inmarcesible del deber cumplido, de las obligaciones satisfechas, de la caridad que todo lo perfuma, de la comprensión que todo lo perdona.
El 22 de noviembre del 2005. Celebrábamos la inauguración de “Asesores y Consultores legales”, en el despacho donde desarrollaríamos con él casi un año de actividades profesionales. Eran momentos de alegría…hoy velamos su cuerpo. Son cosas que duelen, cosas de la existencia. Me entristece la muerte de mi amigo Javier, me consterna saber que un amigo cercano se va. Quedan sin embargo los recuerdos: El camping aquel, hace dos años, en playa hermosa… con su esposa e hijas, con Luisón y familia, con el chilango Pacheco y su señora. Un servidor acompañado por la filosofia de que mas me vale andar solito para disfrutar de la naturaleza.. Javier dirigía la instalación de las casas de campaña ( luego de esas brochetas y malvaviscos asados) la noche seria larga… sobre todo porque un “sur” entró, a las 3 de la mañana, y a desmantelar todo y, a reirnos de nuestra suerte. Con Javier Muchos viajes a Xalapa, desayunos placenteros (VIP) en el equilibrio de las chingas de cada viaje a la capital del estado, y a Coatzacoalcos para ganarnos la tortilla… No tengo ahorita palabras para llegar al corazón de sus seres queridos… No encuentro el lenguaje apropiado para aliviar en algo el dolor de su familia; comprendo además que en estas circunstancias nada que se diga llenará el vacío dejado por una persona tan importante en la vida de alguien.
No conozco otro bálsamo de consuelo para quienes perdemos un ser amado que la oración… es cosa de buscar en ella esa mano piadosa que nos trae la esperanza de que volveremos a reunirnos con quienes son llamados por nuestro Padre Todopoderoso.
Se nos adelantó en el camino” es frase acostumbrada que se acompaña normalmente a los pésames, tendientes a brindar el consuelo necesario para los dolientes… es una gran verdad que nos permite contemplar en el horizonte esa ilusión del reencuentro futuro en la región desconocida. La esposa de Javier sabe del afecto que sus compañeros del despacho le guardábamos. Ella, conocía la amistad y el respeto que nos unía..Con Javier cantábamos la inspiración de Juan de Dios Peza y la de Guillermo Aguirre Fierro… brindando siempre “por la patria , por las flores y por los castos amores…” Contigo quiero ¡amigo! repetir, en ese postrer adiós, cuando el seno amoroso de la tierra se abre, para recibirte: “Manos caritativas, Cuando muera, en símbolo de amor, poned sobre la grama de mi fosa: Una cruz, una llama y una rosa”.
Javier Guerrero Baeza. Dichoso tu, que viajas tranquilo ya hacia la vida espiritual perenne, espejo en el que dios mismo se mira satisfecho, esa vida tuya existirá en el recuerdo de cuantos te amaron y en el corazón infinitamente piadoso de Jesús, quien te ha recibido en su seno para que disfrutes de terna bendición.
Descanse en paz.
Javier Guerrero Baeza. Dichoso tu, que viajas tranquilo ya hacia la vida espiritual perenne, espejo en el que dios mismo se mira satisfecho, esa vida tuya existirá en el recuerdo de cuantos te amaron y en el corazón infinitamente piadoso de Jesús, quien te ha recibido en su seno para que disfrutes de terna bendición.
Descanse en paz.
31 de octubre 2006.
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